domingo, 3 de julio de 2011

Unidad 3: Empezar un texto con la frase escogida (Subió la escalera con desgano)

Subió la escalera con desgano. Aquel trozo de papel que atesoraba en el bolsillo del pantalón, y que únicamente contenía un número de teléfono ya memorizado, estaba a punto de cambiar su vida.

Como cada jueves desde hacía veinte años, había vuelto a quel cine. Pero ese día aquella mano tan largamente deseada y anhelada, aquélla y no otra, se había introducido en el bolsillo de su pantalón mientras él, paralizado por un pánico superior a su euforia, fingía estar atento a la pantalla sin poder reaccionar.

Pero no estaba preparado para que la intención de aquella mano no fuele lasciva; únicamente le depositó un trozo de papel con un gesto revestido de sincera ternura.

Con el comportamiento propio de un adolescente salió a toda prisa del cine. Decidió no volver a casa inmediatamente, aunque esa transgresión de la monotonía haría que no pudiese recurrir a ella como la gran aliada de la mentira que es.

-Nada tiene que ser diferente esta vez, nada tiene que ser diferente esta vez, ...-, se repetía a modo de letanía.

Dos horas más tarde se dio por vencido: aquel trozo de papel seguía allí, era tangible, era real; tan real como se sentía él mismo por primera vez en su vida. Aquel trozo de papel se había convertido en una semilla de felicidad y de esperanza que le exigía sinceridad y honestidad.

Llegó a casa. El trozo de papel se hizo aún más pesado al hacerle ver que aquella placa de bronce llevaba veinte años saludándolo con su AVE MARÍA perforado en el metal... que la espigadora de alabastro llevaba ese mismo tiempo pareciendo indicar el camino al comedor con el gesto de su mano derecha.

Entró en la cocina, contempló a su mujer y sintió un enorme dolor al verla también real por primera vez. Estaba muerta, en vida, pero muerta... y la había matado él. -No puedo hacerle esto-, se dijo. Y estaba a punto de ceder cuando aquel trozo de papel dispuso que ese día, a la que pronunciara sus primeras palabras, el semen contenido en su voz dejaría de ser un secreto consentido.

(De un taller literario que hice en ... 2005?) 

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